
  
 
Como citar: Pasallo, M. J. y Balderas, I. (2021). Percepciones infantiles de la escuela en contexto de conflicto armado. 
Journal of the Academy, 5, 143-155. https://doi.org/10.47058/joa5.9 
Journal of the Academy | 150 | 
A su vez, en comunidades donde la presencia de conflicto armado ha permanecido durante más 
tiempo y de forma continua, es común que las instituciones educativas incorporen formas de 
relacionarse que tienden a reproducir las lógicas del conflicto. Añade Fajardo, et al. (2018) que 
los actores armados suelen imponer en los centros educativos ejercicios autoritarios de poder, 
que tienen como resultado actos de obediencia, control, desconfianza y miedo situación que 
disminuye la posibilidad del diálogo, el debate y el encuentro ciudadano. Estas realidades, 
agrega el mismo autor, suelen transformar la cotidianidad de la escuela, donde se impone la 
presión, el silencio y la incertidumbre. La escuela entonces tiene que ser protegida para ser un 
espacio que protege y cuida. De ahí que sea valioso posicionarla primero como centro de la 
acción comunitaria alrededor de la protección de niñas y niños y segundo como el lugar en 
donde se aprende sobre los riesgos y los daños que puede generarles a corto y a largo plazo el 
conflicto armado (Fajardo, et al., 2018).  
 
Así pues, la escuela puede constituirse como un destacado factor protector de las niñas y niños 
siempre y cuando se constituya en un espacio que vela no solo por la educación formal de la 
niñez, sino que tome en consideración sus derechos, empoderando y habilitando para ejercerlos 
y defenderlos. Siendo esto quizás uno de los hallazgos más sorprendentes de los resultados, 
pues se encontró que los participantes perciben la escuela como un espacio seguro. A pesar de 
que la escuela sea ocupada y violentada por los conflictos presentados en la comunidad, las 
niñas y los niños expresan sentirse más seguros al interior de la escuela que en otros espacios 
que hay en la comunidad:  
 
La escuela es segura, porque adentro de la escuela no tenemos violencia y afuera sí como 
el otra vez que se metieron los contrarios y comenzó la balacera y amarraron a la gente 
y con un leño les pegaban, pero nosotros estábamos aquí, todos juntos y el maestro nos 
cuidó y entre todos vimos qué hacer, porque tenemos más ideas juntos (Niña de 8 años, 
comunicación personal, E13). 
 
Siendo la escuela un lugar de encuentro con los iguales, de socialización y de generación de 
relaciones  de  amistad,  en  ocasiones  son  los  únicos  lazos  y  las  únicas  oportunidades  de 
interacción. En las comunidades de conflicto armado, muchos padres no permiten que sus hijas 
salgan a la calle, para protegerlas, entonces la escuela es la única oportunidad que tienen las 
niñas para socializar con otros que no sean integrantes de su familia: 
 
Como están los armados en el rancho, mi papá no me deja salir para nada de la casa, ni a 
mí y a casi ninguna niña que no sea de familia de la maña […] Solo en la escuela platico 
con las niñas y ahí juego con ellas, en otro lado no (Niña de 11 años, comunicación 
personal, E11).